REMIGIO MORALES BERMUDEZ (1890-1894)

Nació en Pica, Tarapacá, el 30 de septiembre de 1836. Sus padres fueron Manuel Morales y Vera y Catalina Bermúdez y Soto. Después de estudiar en Tarapacá, estuvo dedicado de lleno a los negocios salitreros de su padre; pero opto por incorporarse al Ejército en 1854 cuando se inicio la revolución contra el gobierno del general José Rufino Echenique. Luego del triunfo obtenido en La Palma (1855), fue ascendido al grado de capitán. Integro las filas del batallón Arequipa (1865), al efectuarse la revolución restauradora; participo en la entrada a Lima, se distinguió por su arrojo durante el asalto al Palacio de Gobierno, y fue ascendido a sargento mayor. Con fuerzas partidarias al gobierno del general Mariano Ignacio Prado, marcho hacia Chiclayo (1868) para combatir el levantamiento que encabezo el coronel José Balta; pero hubo en sus filas la deslealtad y, apresado por sus mismos hombres, mereció el trato deferente del caudillo. Elegido este, destaco al sargento mayor Morales Bermúdez al departamento de Loreto, donde su conducta motivo los elogios de la Comandancia General. Bajo el gobierno de Manuel Pardo paso a Trujillo en calidad de comandante del batallón de Gendarmes; luego desempeñó la subprefectura, y en forma interina asumió la prefectura del departamento. Volvió a Lima para organizar el batallón de Cazadores Nº 5 y el batallón Lima Nº 8. Luego de recibirse la declaratoria de guerra formulada por el gobierno de Chile el 5 de abril de 1879, fue enviado al Sur. Estuvo en la toma de Pisagua el 2 de noviembre de 1879, así como en las Batallas de San Francisco el 19 de noviembre de 1879 y Tarapacá el 27 de noviembre de 1879; contribuyó a ordenar la retirada del ejército unido, y participó en la Batalla del Alto de la Alianza el 26 de mayo de 1880. Destacado a Puno, organizó un batallón que debía reforzar las defensas del interior; y al caer la ciudad de Lima en poder del adversario, se presentó ante Nicolás de Piérola en Ayacucho (1881). Ascendido a coronel, se adhirió a la resistencia encabezada por el general Andrés Avelino Cáceres; primero como prefecto de Ayacucho. Activando la movilización de fuerzas y recursos, y luego en las operaciones militares que culminaron en la Batalla de Huamachuco el 10 de julio de 1883. Suscrito el Tratado de Ancón, apoyó la campaña revolucionaria contra el gobierno del general Miguel Iglesias; y derrotando a sus tropas en Canta, facilito la Ocupación de Lima por el general Cáceres. Elegido éste como presidente de la República en las elecciones inmediatas, correspondió la primera vicepresidencia al coronel Remigio Morales Bermúdez (1886-1890) y expirado aquel periodo fue, a su vez, elegido presidente de la República (1890-1894). Su gestión se oriento a preparar la realización del plebiscito que debía efectuarse en Tacna y Arica, según lo previsto en el Tratado de Ancón. El 1 de abril de 1894 fallece en Lima, luego de una grave enferme-dad, haciéndose cargo de la presidencia el coronel Justiniano Borgoño Castañeda.